La arquitectura, que se caracteriza por la valoración de crear espacios para la gente, es una de las artes más antiguas de la civilización humana. Muestra el ideal de su creador y es una impronta de la cultura en donde se desarrolla cada uno. En esta edición queremos destacar a las mujeres que construyeron nuevas formas de expresar su ideal y se ganaron un espacio dentro de la arquitectura mediante sus obras y aportes al rubro.
Por el arq. Luca Meza
LINA BO BARDI
Arquitecta y editora italiana. Fue una de las proyectistas más expresivas de la arquitectura sudamericana del siglo XX. Estudió en la Universidad de Roma La Sapienza y, luego de la Segunda Guerra Mundial, se mudó a Brasil con Pietro Maria Bardi, historiador de arte. Allí plasmó su visión arquitectónica moderna, dejando un legado a la arquitectura de Latinoamérica y del mundo.
En 1950 creó la revista Hábitat y, al año siguiente, diseñó su propia residencia, la famosa Casa de Vidrio, en Morumbí, al sur de São Paulo, Brasil. Hoy esta casa es un monumento nacional y un ícono del racionalismo arquitectónico. En el año 1957, Lina inició la construcción de la nueva sede del Museo de Arte Moderno de São Paulo, obra que terminó siendo premiada en varios concursos y hoy es analizada por miles de arquitectos alrededor del mundo, debido a su implementación de una planta libre con una gran plaza de concreto debajo de un edificio con programa de museo.
En cada una de las obras de Bo Bardi también se plasma una puesta de escena de varias artes, tanto en el diseño mobiliario como en el diseño gráfico. La arquitecta falleció en 1992, y se convirtió en una exponente del mundo de la arquitectura y el diseño.
ZAHA HADID
Madre del deconstructivismo y una mujer multifacética, Zaha Hadid fue la primera mujer en ganar un Premio Pritzker de Arquitectura. La profesional de ascendencia angloiraquí, cursó Matemáticas en la Universidad Americana de Beirut, Líbano, y en 1972 se trasladó a Londres para ingresar a la Architectural Association School of Architecture, donde se graduó en 1977, y poco después se convirtió en la universidad donde ejerció como docente hasta su muerte en 2016.
Los proyectos por los cuales se destacó fueron The Peak, en Hong Kong, China, que nunca llegó a construirse; el edificio de oficinas de Kurfürstendamm, en Berlín, Alemania, construido en 1986, y The Heydar Aliyev Center en Baku, Azerbaiyán.
Al recordar las matemáticas en sus diseños, Zaha fue pionera en la incorporación del diseño paramétrico en sus espacios, lo que le permitió desarrollar proyectos nunca antes vistos, de formas orgánicas y disruptivas.
Zaha también colaboró con las casas de moda y grandes marcas, como Adidas, Bvlgari, Issey Miyake; Rei Kawakubo, de Comme des Garçons, Chanel, Fendi, Miuccia Prada y Louis Vuitton, maison para la cual creó la icónica Bucket Bag.
Fue una arquitecta que buscó poner al límite la contemporaneidad, desafiándose con cada obra. Zaha dejó una imagen de cómo se vería el futuro en todos los aspectos, ya sea filosófico, mobiliario, arquitectónico o en la manera de vestir.
ANNA HERINGER
Anna Heringer nació en 1977 y creció en Laufen, un pequeño pueblo fronterizo entre Austria y Baviera, Alemania. A los 19 años vivió en Bangladesh durante casi un año, donde tuvo la oportunidad de aprender de Deepshikha, una oenegé, sobre el desarrollo sostenible.
Su lección principal fue la experiencia y la estrategia de un desarrollo que busca el éxito a través de los recursos existentes y disponibles, aprovechándolos al máximo en lugar de depender de sistemas externos. Ocho años después, en el 2005, intentó trasladar esta filosofía al campo de la arquitectura.
Para Anna, la arquitectura es una herramienta para mejorar vidas. Es profesora honoraria de la cátedra Unesco de Arquitectura de Tierra, Culturas de Construcción y Desarrollo Sostenible, que se centra en el uso de materiales de construcción naturales.
Ha estado activamente involucrada en la cooperación para el desarrollo en Bangladesh desde 1997 y cuenta con proyectos en Asia, África y Europa. En conjunto con Martin Rauch, ha desarrollado el método Clay Storming, enseñado en varias universidades, como la ETH Zurich, UP Madrid, TU Munich y GSD/Harvard.
El legado de estas arquitectas no solo cambió la manera de habitar y diseñar espacios, sino que aportó a la construcción y percepción de lo que será la arquitectura del futuro.
