Un viaje de sensaciones por Inés Bertón

Inés Bertón, la reconocida tea blender argentina y fundadora de Tealosophy, llegó a Paraguay para un exclusivo evento de la mano de Boarding group, el cual reunió a un selecto grupo de mujeres para vivir una experiencia única. En conversación con Level, Inés nos sumergió en la magia que contiene una taza de té.

Por Kate Reichardt / Fotos Alegría González

Vine hace muchos años a Paraguay y siempre me quedé con ganas de volver, y ahora vuelvo de la mejor manera, invitada por Alejandra Burró y Boarding Group para compartir un momento excepcional acompañada de un grupo de mujeres”, empezó contando Inés. El objetivo de este encuentro fue realizar una cata diferente, que transporte a las invitadas a un viaje o recorrido a través de los sentidos. “La idea es que, a través de una taza de té, la persona pueda llegar a una plantación en Sri Lanka o a unas vainillas de Madagascar, y realmente viajar”.

Hablando acerca de sus inicios en esta profesión, Inés recuerda que se introdujo al mundo del té de una manera totalmente inesperada. En 1993 llegó a Nueva York para trabajar en el museo Guggenheim. Poco tiempo después, empezó a visitar regularmente una casa de té que se encontraba en el subsuelo del museo. Así, empezó a crear blends a partir de té en hebras. En ese lugar, conoció a Fumiko, su mentora japonesa, quién notó la extrema sensibilidad de su nariz y le propuso formarla en el arte del tea blending.

“Viví muchos años en Nueva York y también en el noreste de India, Sri Lanka, Madagascar y Birmania, caminando por las cosechas. Mi especialidad es la cosecha de altura. Debido a la amplitud térmica de la altitud, hace mucho calor de día y mucho frío a la noche, eso hace que la planta de té se quede petiza y se concentre más la clorofila”.

“TENGO UN LEMA BASTANTE SENCILLO: UN TÉ HONESTO SE HACE CON INGREDIENTES HONESTOS, NO ES MÁS QUE ESO. ES ENTENDER LA SOFISTICACIÓN DE LO SIMPLE”.

Años después, Inés regresó a Argentina con la visión de crear su espacio de té propio y fue así que nació Tealosophy. “Para mí, Tealosophy significa el té como lenguaje. Es buscar el lugar donde uno fluye y se siente cómodo. Ese tiempo perfecto que uno encuentra, es armonía”.

El trabajo de Inés recorre el mundo. Desarrolló tés exclusivos para marcas internacionales como Chanel, Hermès y Mercedes-Benz. También creó blends para personalidades como los reyes de España, el dalái lama, Ed Sheeran y Chris Martin.

Recuerda su experiencia con el cantante inglés Ed Sheeran como una de sus favoritas. “Hace poquito me pidieron hacer un blend para él. No sabía muy bien quién era y justo estaban mis sobrinos en casa. Ellos estaban muy emocionados y me pidieron por favor que les lleve a conocer a Ed. Los llevé conmigo bien vestidos como servidores de té y les hice prometer no pedir una foto. Lo simpático fue que ¡el cantante se dio perfectamente cuenta de la situación! ¡Y fue él quien le pidió una foto a ellos! Muy formidable, me encantó esa experiencia y estoy segura de que a mis sobrinos también. Al fin la tía que hace té es muy cool”, relató entre risas.

Para Inés, lo más importante a la hora de tomar el té es entender la sofisticación de lo simple. “Tenemos un lema que es bastante sencillo: un té honesto se hace con ingredientes honestos, no es más que eso. Mucha denominación de origen, hacemos una ardua búsqueda de los lugares de donde creemos que provienen los mejores ingredientes. Tiene mucho que ver con hacer un trabajo genuino”.

Sobre su visita y cata, Inés estaba muy entusiasmada con la idea de disfrutar verdaderamente de una rica taza de té junto a las invitadas. “Hoy estoy feliz de hacer esta fantástica cata en Paraguay y dar a conocer lo que realmente es el té. Boarding Pass habla mucho de la experiencia, y eso se vive cuando uno está abierto, se anima a despertar sus sentidos y a confiar en alguien que te ayude en esa búsqueda. Para una carrera como la mía, la inspiración viene muy de la mano con una agencia que te pueda dar esa tranquilidad de: ‘Vos inspirate y soñá, nosotros vamos a estar cuidando todo’”, concluye Inés.