La diseñadora de 79 años ha decidido hacerse a un lado y dar paso a un equipo diferente, quizá más joven y en sintonía con las tendencias actuales, aunque el principal atractivo de Carolina Herrera fue siempre su estilo atemporal y ultraelegante.
La empresaria venezolana recibió la última ovación la noche del lunes 12 pasado, en el Museum of Modern Art (MoMA) de Nueva York, después del desfile Otoño-2018 ready-to-wear. Este estuvo compuesto por prendas que rindieron homenaje a la estética invariablemente dominante de sus colecciones.
Wes Gordon, quien viene diseñando con Herrera desde hace algunas temporadas, tomará la dirección creativa de la firma, mientras que la leyenda viviente de la moda neoyorquina pasará a desempeñar un rol de embajadora.
Carolina deja atrás un imperio que abarca mucho más que ropa; sus accesorios y líneas de fragancias se han ganado un lugar propio en la industria. Aun así, es difícil imaginarla manteniéndose totalmente al margen de las funciones creativas tras haber presentado nada menos que 73 shows de moda en 38 años de carrera.