En 1975, Givenchy lanzó Gentleman, un perfume sorprendente que transmite una visión singular de la masculinidad, rompiendo con el universo de las fragancias de tendencia de la época. Este año, la marca se renueva por completo, ofreciendo, una vez más, aires vanguardistas para el hombre moderno.
El actor Aaron Taylor-Johnson es la imagen de esta campaña.
Gentleman Givenchy es una composición potente, cuya aura haute couture es fruto de la mezcla de pachulí y especias de fuerte personalidad. Una fragancia que añade una pizca de picante a la sensibilidad y permite que los hombres se distingan.
En esta oportunidad, la maison se inspira en el perfume original de los años 70 para sugerir algo nuevo al gentleman de hoy; un hedonista que disfruta del placer y del de su entorno, pero siempre con generosidad.
Las notas
Un toque oral insólito, ideal para un gentleman de elegancia original. El temple clásico de la lavanda se transforma con la nobleza del iris, que constituye el corazón de esta fragancia, armada por el dúo de maestros perfumistas Nathalie Lorson y Olivier Cresp.
En contraste con la edición de 1975, aparece un acorde de pachulí y de cuero lleno de carácter estructurado, con una nueva escritura amaderada. Este perfume de facetas es la apuesta de Givenchy por una delicadeza que no está́ exenta de temperamento, creando una estela a medida para un hombre moderno, que asume sus sutilezas y sus paradojas; un gentleman de hoy, que respira el renacimiento, siempre con total naturalidad.