Poder Latino

Décadas atrás, la música anglosajona no solo lideraba los charts de las más importantes radios internacionales: También influenciaba en la mayoría de los géneros y artistas en América Latina. Identidad, evolución, trascendencia e influencia de la música y los artistas latinos en la actual industria musical. 

Por Walter Verdún / Fotos gentileza

Por Walter Verdún / Fotos gentileza

Desde Madonna hasta Spice Girls y Gloria Estefan o grupos, como Backstreet Boys o Red Hot Chili Peppers, marcaron a una generación caracterizada por escucharlos y popularizar estilos como el pop, el rock y la música alternativa. Algunos, incluso, grabaron hits en español, avanzando así a América Latina, previo a la expansión del mercado latino a América del Norte y Europa.

A inicios del nuevo siglo artistas, como Ricky Martin y Shakira, hacían el crossover musical, al editar y lanzar un álbum en español y otro en inglés, y promocionarlos en simultáneo con videos y conciertos en distintos idiomas.

Livin’ La Vida Loca o Suerte (Whenever, Wherever), de Ricky Martin y Shakira, respectivamente, son solo ejemplos de temas que obtuvieron éxito internacional, anticipando el inicio oficial de una nueva etapa en la industria con exponentes latinos.

Podríamos citar a la tejana Selena, entre las pioneras que, de algún modo, propiciaron que la presencia y la música latinas se respeten y comercialicen en EE. UU. Durante su breve pero fecunda trayectoria a mitad de los 90 y pese a no calificar como latina, sus canciones en español trascendieron y allanaron el camino a futuros artistas de lengua hispana; como Jennifer Lopez. Esta, además de interpretar a Selena en su biografía cinematográfica, también usó esta plataforma para darse a conocer en el mundo artístico antes de catapultarse con su primer material discográfico: On the 6, álbum que sumó versiones en español de los principales temas de J.Lo.

Otras figuras, como Enrique Iglesias, Marc Anthony, Daddy Yankee, Pitbull, Luis Fonsi, Maluma y Romeo Santos, son solo algunos exponentes latinos de enorme notoriedad en EE. UU. y Europa. En su mayoría, son responsables de que el público anglosajón baile y escuche géneros como la salsa, las baladas románticas y el reggaeton.

EL BOOM DEL REGGAETON Y LA IDENTIDAD DE LA MÚSICA LATINA

Nacido a fines de los 90 en Puerto Rico, el reggaeton evolucionó del mix de ritmos jamaiquinos, reggae, hip-hop y caribeños, incluye versos y rap en español, y es uno de los estilos de mayor difusión y producción de la última década.

Muchos grandes artistas latinos produjeron alguna pieza con este particular sonido, hoy la representación musical latina más sonada del globo. Aunque tanta fama podría resultar contraproducente para la conservación identitaria: en la índole innovadora del reggaeton reside el motivo de su repercusión global. Pero la interpolación de la música estadounidense hace que pierda identidad original y sus ritmos se tergiversan y manipulan para adecuarlos al target norteamericano.

Daddy Yankee y Luis Fonsi, con la adhesión de Justin Bieber, lanzaron el remix comercialmente más exitoso de la década: Despacito, el que arribó a las pistas mundiales, batió récords de visitas en YouTube y, más significativo aún, abrió las compuertas para que artistas, como J Balvin, Ozuna, Bad Bunny, Nicky Jam y Karol G, entre otros, mostraran al público del norte de que eran capaces, instando a colegas de ese hemisferio a intentar producir tracks latinos.

En enero del 2019, Daddy Yankee lanzó Con calma, cuyo encanto fue extraído de Informer (1992), de Snow, utilizando la melodía y adaptando nuevas letras. En julio, el corte de Anuel AA China hizo de la melodía del clásico de Shaggy It Wasn’t Me (1999) uno de los temas más escuchados de ese año. En octubre, J Balvin y The Black Eyed Peas estrenaron Ritmo; composición que usa el coro de El ritmo de la noche, de Corona. Todas estas obras –muchas interpretadas en español e inglés– treparon al #1 en charts latinos y anglosajones.

YouTube indicó que las vistas mensuales de cantantes latinos subieron un 178 % en Reino Unido, 185 % en Francia, 352 % en Egipto, y 940 % en Indonesia. Esto grafica el crecimiento global del talento de una región, que perfila la nueva fábrica de megahits en streaming.

La plataforma acotó que la lista de los 100 videos más vistos de la historia incluye hoy 19 canciones latinas, en contraste con las apenas cinco del 2015. La feroz aceptación de Despacito y otros autores latinos no se limita a YouTube: ese tema, como también Mi gente, de J Balvin y Willy William, se consagraron como los más reproducidos en Spotify.

La fórmula y el auge actual de la cultura musical latina no son más que el resultado de una cantidad inmensa de artistas de habla hispana, que creó un propio sonido e invita a las demás regiones a disfrutarlo.

Al final, el arte pierde sentido, si no se transforma, comparte o evoluciona.

DESPACITO, DE DADDY YANKEE Y LUIS FONSI, FUE EL REMIX COMERCIALMENTE MÁS EXITOSO DE LA DÉCADA, BATIÓ RÉCORDS EN YOUTUBE Y ABRIÓ LAS PUERTAS PARA OTROS ARTISTAS LATINOS.